El Primer Tribunal Colegiado del Juzgado de Primera Instancia de la provincia Santo Domingo condenó ayer a 30 años de prisión a Affe Gutiérrez Gil, esposo de la comunicadora Sarah Pepén, y a 10 años al padre de él, Rafael Gutiérrez Heredia, por la muerte del joven Wester Solís, de 15 años, ocurrida en el ño 2005, en las inmediaciones del Hipódromo Quinto Centenario, luego de un incidente en un lavadero de autos ubicado en la calle Josefa Brea número 189 del Distrito Nacional, propiedad de la familia Gutiérrez.Esta condena de inmediato provocó la reacción de los parientes de los imputados, quienes acusaron al tribunal de vender la sentencia al empresario Juan Ramón Gómez Díaz.
“Esta fiscalía es una Cueva de ratas, esta fiscalía es una cueva de ratas, que le vendió el expediente (a Juan Ramón Gómez Díaz), y le vendió la inocencia de mi familia, dijo ana Josefa Gil”, madre de Affe.
La abogada de los condenados, Zaida Carrasco, anunció que apelará la sentencia en los próximos días y acusó a la fiscalía de fabricar testigos.
La audiencia inició a las 2:00 p.m., y se prolongó por tres horas sumiendo en la ansiedad y el nerviosismo a los imputados y los presentes en el juicio.
El Primer Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo, es presidido por el magistrado Julio César Lara, quien antes de dictar la sentencia ofreció una breve explicación acerca del desarrollo del caso.
La sentencia se produce a pesar de circular una certificación de la Fiscalía del Distrito Nacional que afirma que el piloto Affe Gutiérrez Gil, y su padre Rafael Gutiérrez, estaban presos en esa jurisdicción el día que fue hallado el cadáver Wester Junior Solís, el 12 de junio de 2005, cerca del hipódromo Quinto Centenario.
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