Parece que la destitución José Antonio Rodríguez como ministro de Cultura no fue por dar el premio Pedro Henríquez Ureña a Vargas Llosa, ni por las frecuentes protestas en su contra o los altos salarios que pagaba a algunos cantautores que supuestamente no cumplían horario.
Según una fuente de entero crédito, el funcionario no pudo complir con la encomienda de convencer al diputado Fidelio Despradel, su suegro, para que no se negara a juramentar a Lucía Medina, hermana del presidente, como presidenta de la Cámara de Diputados.
Como el diputado de mayor edad, el representante de de Alianza País, Fidelio Despradel, tenía bajo su responsabilidad juramentar el bufete directivo que asumió las riendas de la cámara baja, pero se negó.
“¿Qué garantía de control efectivo podrá realizar esta Cámara de Diputados sobre los actos del Poder Ejecutivo si su titular es hermana del señor Presidente y miembra del mismo partido?”, cuestionó el diputado nacional Fidelio Despradel, de 79 años.
El cantautor José Antonio Rodríguez habría recibido la encomienda de convencer al veterano político, reconocido por sus posturas socialistas, debido su cercanía, ya que es esposo de Mónika Despradel, hija del diputado.
De acuerdo con la fuente a la que tuvo acceso Z101Ditigal.com, al nuevo ministro de Cultura, Pedro Vergés, le tomó por sorpresa su designación, debido a que no se le había informado, supuestamente porque la decisión fue tomada poco antes, ante el fallo de Rodríguez.
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